Cómo evitar que los hijos sufran por conflictos emocionales de pareja
En toda relación de pareja es normal que existan diversos motivos de dificultades emocionales entre el hombre y la mujer, ya sea por infidelidad, falta de intimidad, falta de confianza o escases de sentimientos. Pero, se han puesto a pensar cómo dicho problema afectan a nuestros hijos.
La etapa de la infancia entre 6 a 11 años es conocida como el proceso esponja, ya que es ahí donde los niños imitan o absorben todo lo que los adultos hacemos. Por eso es muy importante que las parejas sepan manejar momentos tensos, moderar sus actos y lenguaje en presencia de sus hijos.
Actualmente se tiene la idea de que ya no existe una familia estable y duradera, por el simple hecho que las parejas actuales son muy jóvenes, lo que implica que la imagen perfecta familiar sea simplemente una utopía. Sin embargo, un modelo familiar perfecto no es aquel que sea de color de rosas, sino el que a pesar de las espinas y estacas entre los pilares familiares (Padre y Madre) siempre saben manejar las adversidades para que no afecten a terceros (hijos).
En este texto te presentamos 3 consejos para evitar afectar a los niños con los problemas emocionales entre el hombre y mujer:
– No hacer notar el estrés: La mayoría de las veces una discusión inicia por esta característica, ya que él o ella puede que haya tenido un día pesado y lo único que quiere es que lo abrumen con problemas, provocando que ignoren a sus hijos en el momento tenso. Traten siempre de llevar una discusión en la intimidad y no frente a los niños.
– Siempre tener una comunicación constante: Al momento de llagar a sus hogares es importante hablar con nuestros niños, debido a que ellos siempre tendrán diversos temas para platicar como: su día en la escuela, lo que aprendieron, sus preocupaciones o lo que les gusta. No dejen nada para después cuando se trata con sus hijos, porque ellos siempre serán importantes ante todo circunstancia.
– No evites que vea su padre o madre: Si te llegas a separar de tu pareja no tengan la mala idea prohibirle al infante ver a su padre o madre, porque esto resulta nocivo en la vida diaria de nuestros niños como en la parte académica y psicológica. Es importante mostrarle que a pesar de todo la relación entre padres siempre debe ser estable.