Adelgaza comiendo alimentos prohibidos
Ha llegado el día que muchos esperaban: un reciente estudio acaba de demostrar que hincharnos a patatas fritas, pizza, hamburguesas o similares, podría realmente ayudarnos a adelgazar.
No es la primera investigación, ni mucho menos, que asegura que comer alimentos grasos puede resultar más beneficioso en el proceso de pérdida de peso y ayudarnos verdaderamente a adelgazar, pero en este caso los autores no creen que estos deban formar parte de nuestra dieta diaria. La ‘dieta del capricho’ ha encontrado el truco definitivo para cumplir con un plan de alimentación saludable a largo plazo y perder esos kilos de más que tanto nos cuesta quitarnos.
Solo hay que seguir una máxima, y te va a resultar bien sencilla y apetitosa.
Una norma de lo más agradable
Para encontrar el paso clave hacia una dieta realmente efectiva, los investigadores de la escuela Business & Economics de la Universidad Católica de Lisboa mantuvieron a los participantes siguiendo un régimen estricto de 10.500 calorías a la semana (en España se consume un promedio de 1.820 calorías diarias, según el último estudio realizado por la Fundación Española de Nutrición en diciembre del pasado año).
Siguiendo la idea propuesta en el Génesis de ‘el séptimo día: descanso’, a la mitad de los participantes en el estudio se les permitió comer lo que quisiesen los domingos.
Después de dos semanas, los dos grupos habían reducido sus índices de masa corporal. Si bien no hubo diferencia significativa en la cantidad de peso que los dos grupos habían perdido, los que habían disfrutado de un día de comilona a su gusto estaban más felices y motivados para seguir trabajando en sus objetivos de pérdida de peso, y a la larga eran capaces de mantener su régimen saludable semanal sin saltárselo. “La indulgencia ocasional hace que se siga una dieta más sostenible”, asegura la doctora Rita Coelho do Vale, autora principal de la investigación.